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  • Flying Eye Hospital: Un avión medicalizado para labores humanitarias

Todos hemos visto fotos y vídeos de grandes aviones convertidos en auténticas mansiones por dentro, pero, ¿alguna vez has visto un avión convertido en un hospital?

Son aviones medicalizados, también llamados ambulancias aéreas, que están equipados con el material y los equipos esenciales necesarios para proporcionar atención de urgencia, medicamentos y aparatos a los pacientes que requieren asistencia médica urgente.

En el post de hoy, hablamos de aviones medicalizados, qué tipos hay, cuál es su operativa y, sobre todo, conocemos más sobre el Flying Eye Hospital, el único avión-hospital operativo actualmente. ¿Nos acompañas?

La misión de los aviones medicalizados

Los aviones medicalizados son fundamentales para el transporte sanitario nacional o internacional de personas que padecen enfermedades graves, que han sufrido un accidente o que están en situación de emergencia médica y necesitan repatriación, entre otros.

Por supuesto, tal como ocurre con una ambulancia, los aviones medicalizados están equipados con todo tipo de material médico vital, tecnología punta para tratar cualquier urgencia médica e incorporan un gran almacén de fármacos para dar soporte al paciente.

Además de la tripulación correspondiente, compuesta de pilotos y tripulantes de cabina, en un avión medicalizado o ambulancia aérea, trabaja un gran equipo de médicos y personal de enfermería todos certificados obligatorios de medicina aeronáutica.

Flying Eye Hospital: un auténtico avión-hospital que también es universidad

Aunque podría pasar por un avión cualquiera cuando se observa desde fuera, la realidad es bien distinta.

El Flying Eye Hospital es un proyecto puesto en marcha en los años 80, por la ONG norteamericana Orbis y la Universidad Católica de Chile, que involucra un equipo de 28 oftalmólogos, personal de enfermería, anestesistas y auxiliares, originarios de hasta 15 países diferentes.

Todos ellos ejercen a bordo del único avión hospital en el que se realizan cirugías oculares en todo el mundo y en el que, además, se forma a médicos de países menos desarrollados a llevar a cabo operaciones oftalmológicas con las últimas técnicas.

Y es que, se estima que el 80% de las enfermedades oftalmológicas tienen solución, por lo que, en muchos casos, la diferencia entre que un paciente pueda seguir viendo o no, está en la formación y equipamiento de los doctores del lugar donde se encuentra.

Operativa del Flying Eye: ¿Cómo se organiza un avión hospital?

Cuando el avión llega a destino, los miembros del equipo se encargan de preparar todo para que pueda empezar la misión.

Una vez el avión está preparado, el equipo de médicos y cirujanos comienzan con las operaciones de mayor gravedad, en la que se aprovecha para formar a los profesionales del país. También se habilita una zona de consulta para aquellos pacientes que no tienen tanta gravedad.

Todo el proceso se realiza dentro del avión, por lo que es necesaria una gran coordinación con la autoridad aeroportuaria correspondiente para permitir el paso de personas de un lugar a otro.

Actualmente, para poder funcionar con normalidad, el Flying Eye Hospital necesita un equipo mínimo de 14 profesionales. Y, antes de cada misión, Orbis necesita unos 18 meses para programar y coordinar todas las intervenciones que se van a realizar.

Los diferentes aviones que han formado parte del proyecto

La historia del Flying Eye Hospital comenzó en 1980, cuando la compañía United Airlines donó su último DC-8 a la ONG. El DC-8 es un avión norteamericano de cuatro motores que hizo su primer vuelo en 1958. Su diseño le permite transportar grandes cantidades de carga, por lo que era el avión perfecto para convertirlo en un hospital.

En 1982, la actriz y filántropa norteamericana Dina Merrill, bautizó el avión antes de su primera misión, que tuvo lugar en Panamá. Y, durante los primeros años de servicio, el hospital volante ganó una gran popularidad y reconocimiento entre la sociedad norteamericana.

En 1992, Orbis consigue un nuevo avión, un DC-10 que dobla el tamaño del DC-8, permitiendo aumentar el equipamiento del avión. Además, en esos 10 años, se realizaron grandes avances en el material utilizado en las intervenciones oftalmológicas, por lo que se aprovechó para actualizar el equipamiento.

En 2016, Fedex donó un MD-10, que, gracias a la colaboración de diferentes empresas y organismos, está equipado con la más moderna tecnología. Además, el MD-10 ofrece un alcance que dobla al de su predecesor y el número de pilotos necesarios se reduce de tres a dos.

En la actualidad, los pilotos que vuelan este avión son voluntarios de la compañía Fedex.

Visita el avión medicalizado Flying Eye virtualmente

Y es que, a ver, ya te imaginarás que visitar el avión presencialmente es bastante difícil. Así que Orbis ha diseñado un recorrido virtual para que todos los aerofrikis, como nosotros, podamos ver cómo es su interior.

Además, Sam Chui, el conocido youtuber de aviación, ha hecho también un vídeo a bordo del avión. ¡No te lo puedes perder!

Esperamos que este artículo te haya servido para aprender un poco más sobre aviones medicalizados y sobre la increíble labor que Orbis hace con su Flying Eye Hospital.

Y si quieres descubrir más curiosidades aeronáuticas, te recomendamos que eches un vistazo a nuestro blog de aviación, en el que podrás leer sobre cómo se planifica una ruta de vuelo, qué es la librea de un avión o, incluso, en qué se parecen los aviones a los pájaros. ¿Te lo vas a perder?

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